IPS cuenta con 930 inmuebles, y el Consejo evalúa la venta de improductivos.
El Instituto de Previsión Social (IPS) se encuentra en una fase decisiva al considerar la venta de una parte significativa de su patrimonio inmobiliario. La propuesta surgió durante una reciente reunión del Consejo de Administración, donde se discutieron las implicaciones de la nueva Ley de Pensiones.
El presidente del IPS, Jorge Brítez, presentó la intención de vender los aproximadamente 930 inmuebles bajo la gestión del organismo. La posición del ente ha cambiado drásticamente desde la promulgación de la Ley N° 7.235/2023, que otorga al IPS la potestad de adquirir y vender activos. Esta ley abre la puerta a la posibilidad de deshacerse de propiedades consideradas improductivas, lo que ha generado un debate interno sobre la mejor forma de manejar esta transición.
Hugo Díaz, director de Inversiones del IPS, argumentó que muchos de estos inmuebles no generan ingresos, sino que solo representan costos. Durante la reunión, Díaz hizo hincapié en que el IPS se encuentra en desventaja cuando se trata de administrar bienes raíces y que, por lo tanto, la venta de propiedades que no cumplen con un propósito productivo es una estrategia que podría beneficiar al ente. «No estamos capacitados para administrar», se escuchó en los pasillos del Consejo, subrayando una inquietud compartida por varios consejeros.
Antes de la nueva legislación, la venta de propiedades por parte del IPS estaba restringida, lo que limitaba su capacidad de gestión y sostenibilidad financiera. Con la promulgación de la Ley de Pensiones, el ente se encuentra ahora en una posición más favorable, habilitado para realizar transacciones que fueron imposibles en el pasado. «El IPS puede comprar y vender activos», enfatizó Díaz, resaltando la importancia de esta flexibilidad en la gestión patrimonial.
En términos financieros, el IPS ha reportado ingresos significativos por concepto de arrendamientos. Según Díaz, la institución percibe cerca de 25 mil millones de guaraníes al año por los inmuebles que actualmente tiene en alquiler. Sin embargo, esta suma se ve empañada por los costos de mantenimiento y los gastos asociados a las propiedades que no están siendo utilizados de manera efectiva. La discusión sobre la venta de inmuebles podría, en teoría, transformar la relación del IPS con sus recursos y optimizar sus ingresos.
La identificación de bienes improductivos se convierte, por tanto, en un tema crítico para el futuro financiero del IPS. Los consejeros enfatizaron la necesidad de una evaluación rigurosa de cada propiedad, considerando no solo su rendimiento económico, sino también su impacto en la misión general del IPS. La importancia de alinear los activos del ente con sus objetivos institucionales se hizo evidente en las discusiones.
Hay quienes sostienen que la venta de estos inmuebles podría generar una inyección significativa de recursos que podría ser destinada a mejorar otros servicios esenciales del IPS. Sin embargo, también existen preocupaciones sobre el futuro de aquellos espacios que podrían ser potencialmente valiosos si se gestionan correctamente. Las decisiones que se tomen en este momento tendrán implicaciones a largo plazo no solo para la institución, sino también para la comunidad a la que presta servicios.
La proposición de venta, aunque tentadora, no está exenta de desafíos. El IPS necesitará implementar un plan estratégico que garantice que las ventas se realicen de manera adecuada, maximizando su beneficio económico y minimizando la posibilidad de controversias. La regulación adecuada en este proceso será esencial para asegurar que las decisiones tomadas sean transparentes y en el mejor interés de todos los involucrados.
A medida que el IPS avanza hacia este nuevo capítulo, las expectativas son altas. La combinación de una legislación favorable y un enfoque renovado hacia la gestión de activos podría marcar una diferencia significativa en la sostenibilidad de la institución. El debate continuará en futuras reuniones del Consejo, donde se espera que se desarrollen propuestas más concretas sobre cómo llevar a cabo esta venta y qué inmuebles estarán en la lista para su posible liquidación. La dirección que tome el IPS podría tener repercusiones en el sistema de pensiones del país y en la confianza del público en el manejo de sus recursos por parte de la entidad.