Isla de Francia: vecinos protegen uno de los últimos espacios verdes de Asunción
Manifestaciones en Asunción por protección de espacios verdes ante construcción de ciudad deportiva
Vecinos de Asunción y áreas circundantes se manifestaron el sábado, oponiéndose a la construcción de una "ciudad deportiva" en un área protegida, argumentando la importancia de preservar uno de los últimos pulmones verdes de la capital. Con pancartas en mano y gritos de protesta, los ciudadanos expresaron su firme rechazo a la tala de árboles en un espacio considerado vital para la biodiversidad local.
La convocatoria reunió a un gran número de personas que denuncian que el proyecto amenaza con la destrucción de un bosque urbano de 7,8 hectáreas, que ha sido declarado protegido bajo la ley de deforestación cero. Los manifestantes informaron que ya se han talado más de un centenar de árboles en la zona conocida como Isla de Francia, un lugar que alberga una rica fauna y flora, y que, según ellos, debe ser preservado para las generaciones futuras.
Luciana de Amarilla, vocera del grupo de manifestantes, destacó que las autoridades no están considerando adecuadamente el valor natural del terreno. "Aunque creemos que el desarrollo urbano es necesario, no debe ser a costa de nuestro medio ambiente. Este espacio no solo contiene árboles centenarios, sino que también es hogar de diversas especies que se verían amenazadas por la construcción", afirmó Amarilla durante la manifestación.
Además, Amarilla advirtió sobre otra preocupación importante: la existencia de una red subterránea de agua dulce en la zona. Según la vocera, esta fuente vital también se vería en peligro con la progresiva construcción del complejo deportivo, lo que podría afectar no solo a la flora y fauna, sino también a las comunidades cercanas. “Es fundamental que se realicen estudios geotécnicos, hidrológicos y de biodiversidad antes de proceder con cualquier obra”, agregó, enfatizando la necesidad de un enfoque integral en el desarrollo urbano.
Este conflicto ha ganado atención mediática en los últimos días, dado el creciente interés por la conservación de espacios verdes en entornos urbanos. En un momento donde las ciudades buscan reducir su huella ecológica, la oposición de los vecinos resalta la necesidad de equilibrar el desarrollo con la preservación ambiental.
Aurelio Meza, un viverista y propietario de la tierra vecina, también alzó su voz en defensa del espacio. Relató cómo su familia ha estado vinculada a la Isla de Francia durante generaciones y lamentó que su legado familiar y el valor incalculable del entorno natural estuviesen amenazados. "No solo es un lugar de recreación; es un espacio que pertenece a nuestra historia y cultura", expresó Meza, describiendo cómo esta área ha sido parte integral de su vida y su familia.
Los organizadores de la manifestación han solicitado informes oficiales sobre la construcción proyectada en el predio del Instituto de Previsión Social (IPS), así como la realización de claros estudios de impacto ambiental. Esperan que la comunidad y las autoridades tomen en cuenta sus inquietudes y busquen alternativas que no impliquen la destrucción del bosque urbano.
A medida que la protesta continúa, queda por ver si las autoridades atenderán a las demandas de los vecinos y reconsiderarán los planes para desarrollar el área, o si, por el contrario, se insistirá en la construcción de la ciudad deportiva. La situación plantea un dilema significativo en el que se entrelazan el progreso urbano y la conservación ambiental, un desafío presente en muchas ciudades del mundo.
En tanto, los manifestantes reafirmaron su determinación de seguir luchando por la protección de este valioso espacio verde. "No nos detendremos hasta que se escuchen nuestras voces y se comprendan las implicaciones de este proyecto", concluyó Amarilla, instando a más ciudadanos a unirse a la causa y a defender la naturaleza que, según ellos, es un patrimonio común de todos.