Joven herido con arma blanca se encuentra en grave estado.
Un joven fue atacado con un arma blanca en el barrio San Blas, lo que derivó en su ingreso crítico al Hospital Regional tras recibir asistencia de bomberos voluntarios.
El incidente ocurrido el pasado lunes 14 de octubre, alrededor de las 23:00 horas, ha llamado la atención de la comunidad de Pedro Juan Caballero. Rigoberto Martinez Castillo, de 22 años, se convirtió en la víctima de un ataque con arma blanca en plena vía pública del barrio San Blas, una zona que ha enfrentado preocupaciones por la violencia y el crimen en los últimos años.
Según las primeras investigaciones realizadas por la Policía Nacional, Rigoberto es señalado por ser adicto a las drogas y cuenta con antecedentes penales que incluyen un arresto por reducción en 2023. Estos antecedentes han sido un tema recurrente en las argumentaciones sobre la situación de seguridad en la región, donde el consumo y tráfico de sustancias ilegales han proliferado en los últimos años.
Los reportes indican que, tras el ataque, un hombre no identificado trasladó a Rigoberto hasta el cuartel de los Bomberos Azules en una motocicleta, dejando al herido en el lugar y abandonando la escena rápidamente. Los bomberos voluntarios, al asumir la emergencia, realizaron un rápido traslado del joven al Hospital Regional, donde se le diagnosticó una herida penetrante en el pecho, específicamente en el lado izquierdo, lo que ha generado gran preocupación en su estado de salud.
Cecilia Castillo, madre de la víctima, expresó su desesperación y preocupación por la situación crítica de su hijo. Reconoció que Rigoberto ha enfrentado problemas relacionados con la adicción a sustancias ilegales y que frecuentemente se encuentra en el arroyo Punta Vakapi, un punto considerado como refugio para personas en circunstancias similares y donde, desafortunadamente, se registran múltiples actos delictivos.
Este trágico suceso ha reavivado el debate sobre la crisis de adicción que afecta a jóvenes en Pedro Juan Caballero y la falta de recursos adecuados para abordar el problema. Las autoridades locales han sido instadas a ofrecer programas de rehabilitación y prevención que puedan atender las complejidades socioeconómicas que subyacen a este fenómeno. Asimismo, se destaca la necesidad de implementar medidas de seguridad más efectivas para proteger a los ciudadanos de la violencia creciente en ciertos barrios de la ciudad.
La comunidad de San Blas ha sido testigo en reiteradas ocasiones de episodios de violencia, lo que ha llevado a un incremento en la preocupación general entre los residentes. Las autoridades locales, ante el escenario, han manifestado su compromiso de reforzar la vigilancia y el patrullaje en las áreas vulnerables, para mitigar los riesgos y ofrecer un entorno más seguro para los habitantes.