La Fiscalía de la Ciudad de México confirma que el asesinado en la Zona Rosa era El Panu, jefe de seguridad de Los Chapitos.
La Fiscalía de Ciudad de México ha confirmado, cuatro días después, que el hombre asesinado este domingo en un operativo militar en la Zona Rosa, la capital del país, era Óscar Medina, también conocido como Óscar Medina. El Señorquien era el jefe de seguridad del grupo Los Chapitos dentro del Cártel de Sinaloa. El Ministerio Público realizó una pericia que confirmó la identidad del primer teniente de Iván Archivaldo Guzmán Salazar, hijo mayor de Joaquín. El Chapo Guzmán, exlíder de la pandilla. Según un informe de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la capital, el ataque de Medina ocurrió este domingo mientras comía en un restaurante de la zona de Juárez, en la calle Niza. Fue en un lugar donde dos personas comenzaron a dispararle a él y a sus amigos, un hombre y una mujer. Los agresores se dieron a la fuga a bordo de una motocicleta.
La identidad de la víctima fue un misterio durante varios días. Era jueves de Navidad cuando la central confirmó que se trataba de El Panu. Según el Departamento de Estado de Estados Unidos, El Panu era el máximo líder del Cartel de Sinaloa y el jefe diario de las fuerzas de seguridad de Guzmán Salazar y sus hermanos, Los Chapitos. Medina supervisó a cada uno de los funcionarios provinciales de los sucesores del Chapo.
La agencia antinarcóticos del vecino del norte del país, la DEA, Ofreció una recompensa de hasta 4 millones de dólares. de las informaciones que llevaron a la detención o condena del funcionario, «en casos relacionados con el tráfico internacional de drogas, y por su labor dentro del Cártel de Sinaloa, grupo criminal con problemática internacional», señaló un comunicado de la Fiscalía, que ha iniciado una investigación sobre el asesinato de las personas indicadas.
La mayor confusión sobre la identidad de Panu está relacionada con lo que dijo su esposa tras el asesinato. La mujer, María José Rojo, modelo, hija del subsecretario de Turismo en Sinaloa, confirma que su esposo se llamaba Óscar Ruiz y era un empresario de Mazatlán, costa de Sinaloa, quien se encontraba de visita en la capital con su familia durante las fiestas navideñas. Otro factor detrás de las conspiraciones apunta a las herramientas de inteligencia de los funcionarios gubernamentales. El asesinato se produjo cerca de las oficinas de la Fiscalía General de la República (FGR), en una zona densamente poblada. Con tanta libertad, uno de los jefes del cartel de Sinaloa y uno de los más buscados por Estados Unidos se trasladó al centro de la ciudad.