Vendedores informales se resisten a abandonar las calles y veredas de San Lorenzo

En un intenso despliegue de fuerzas, la Municipalidad de San Lorenzo intentó despejar zonas del mercado local ocupadas por vendedores informales, generando un enfrentamiento entre ambas partes.

Los funcionarios municipales se presentaron en el mercado, acompañados por agentes de la Policía Nacional y del Grupo Especial de Operaciones (G.E.O.), con la intención de hacer cumplir la ordenanza N° 18/2024, la cual regula el estacionamiento tarifado y controlado. Sin embargo, en el momento de la intervención, los vendedores informales protagonizaron una fuerte resistencia, impidiendo que los funcionarios cumpliera su objetivo.

Durante el enfrentamiento, los comerciantes, muchos de ellos con años de experiencia en el lugar, defendieron sus espacios con gritos y empujones. Una de las vendedoras expresó su indignación por el intento de desalojo: “No pueden venir así de un día para otro a querer quitarnos nuestros lugares. ¿Qué vamos a hacer? Nosotros tenemos una vida, hijos, deudas que cumplir”, comentó, visiblemente afectada por la situación.

Pese a la presencia de fuerzas policiales, los funcionarios de la Municipalidad no lograron hacer efectiva la orden de desalojo. La resistencia de los vendedores resultó ser más fuerte de lo esperado, y según testimonios, muchos de ellos ya habían accedido a despejar una parte de los espacios requeridos por la Municipalidad, debido al temor de ser despojados de sus pertenencias de manera violenta.

Tras el fallido intento de despeje, Juan Manuel Enciso, uno de los funcionarios presentes, explicó que su intención era liberar tres espacios “que aún se mostraban resistentes al pedido de despeje”. Además, enfatizó la necesidad de dialogar con los vendedores y hacer les entender la importancia de ordenar el mercado. “Iremos por el camino del diálogo, con paciencia, para que comprendan que la organización del mercado es necesaria”, aseguró.

El conflicto pone de manifiesto la delicada situación que viven los vendedores informales en San Lorenzo, quienes se ven obligados a luchar por su medio de vida frente a las medidas implementadas por la Municipalidad. La tensión, agudizada por la crisis económica que atraviesa el país, refleja la complejidad del fenómeno del comercio informal y la falta de espacios adecuados para la actividad comercial.

Mientras tanto, los vendedores continúan aferrándose a sus puestos de trabajo, reiterando la importancia que tienen para sus familias. Esta situación también plantea un desafío para el municipio, que se enfrenta a la tarea de encontrar soluciones que permitan regular el comercio sin afectar los intereses de quienes dependen de este.

El episodio en el mercado de San Lorenzo no es un caso aislado, ya que muchas ciudades en el país enfrentan luchas similares entre las autoridades y los comerciantes informales. La falta de regulación adecuada, junto con la necesidad de ingresos para subsistir, crea un escenario complicado donde el diálogo se torna fundamental para alcanzar acuerdos y soluciones viables.

A medida que la situación evolucionará, quedará por verse cómo reaccionará la Municipalidad ante la resistencia y cuáles serán las próximas estrategias para lograr un equilibrio entre el ordenamiento del espacio público y la protección de los derechos económicos de los vendedores informales. La comunidad espera que se encuentren medidas efectivas que permitan tanto mantener la organización del mercado como ofrecer alternativas a aquellos que han convertido el comercio informal en su única fuente de ingresos.