Video: Rehabilitan clínica del primo de Buzarquis clausurada en supuesta represalia.
La reciente rehabilitación de una clínica vinculada al primo del senador Enrique Buzarquis ha desatado polémica en el ámbito político nacional tras el pago de un canon al Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
El abogado de la Policlínica EMPE, Pablo Faccioli, anunció, a través de un video, que la Superintendencia de Salud había emitido la resolución número 220 del 2024 que levantó la clausura temporal del establecimiento. Esta decisión se produjo luego de que la clínica se viera envuelta en controversias tras el escándalo que rodeó al intendente de Asunción, Óscar «Nenecho» Rodríguez, acusado de irregularidades en su gestión.
La situación comenzó a intensificarse cuando el senador Buzarquis decidió encadenarse frente a la sede de la Municipalidad de Asunción en un acto de protesta, exigiendo la renuncia del intendente Rodríguez. En esta manifestación, su primo, el médico Víctor Buzarquis, fue retratado sosteniendo un cartel de protesta, lo que generó aún más atención mediática al involucrar a figuras públicas en un reclamo de responsabilidad política.
El planteamiento del senador resuena en un contexto más amplio de descontento ciudadano respecto a la administración de Rodríguez, quien ha enfrentado críticas por su manejo de la ciudad y sus vínculos políticos. La coincidencia de la clausura de la clínica con este escrache político ha llevado a algunos a cuestionar la legitimidad de las acciones del intendente y del aparato administrativo municipal, sugiriendo que la sanción podría haber estado motivada por razones políticas en lugar de problemas reales de funcionamiento del establecimiento de salud.
A pesar de la reciente autorización para reanudar actividades, la clínica aún enfrenta desafíos importantes. Aunque cuenta con la habilitación de la Superintendencia de Salud, válida hasta 2026, aún está pendiente de obtener la habilitación comercial municipal, que actualmente se encuentra en trámite. El médico Buzarquis ha señalado que la burocracia de la administración de Rodríguez ha impedido el aceleramiento de este proceso, lo que ha dejado a la clínica en una especie de limbo legal.
Mientras tanto, las tensiones entre la administración de Rodríguez y el senador Buzarquis continúan creciendo. Muchos ciudadanos ven la respuesta del sistema de salud municipal como un reflejo de las luchas de poder que caracterizan la política paraguaya. La autorización de la clínica ha revitalizado la discusión sobre la relación entre instituciones de salud y las políticas locales, y la transparencia en los procesos administrativos.
Esta situación ha puesto en el centro del debate no solo el estado de la clínica, sino también cómo las decisiones políticas pueden influir en el acceso a servicios de salud. Los ciudadanos esperan que estos eventos sirvan como un llamado a la responsabilidad tanto de las autoridades locales como de los senadores, para garantizar que el acceso a la salud no se vea comprometido por intereses políticos.
La próxima semana, está programada una audiencia pública en la que se prevé que tanto el senador Buzarquis como el intendente Rodríguez sean invitados a discutir sus respectivas posturas sobre este caso. La repercusión de este incidente continúa, y muchos se preguntan qué otros sectores de la política nacional podrían verse involucrados a medida que se desarrolle esta controversia.